Capítulo 8 - Viaje Final

1 de julio de 2022

    Si hay algo que me ha marcado especialmente ha sido el broche final. A principios de junio, mis padres me vinieron a buscar a Oregón para pasar unas semanas juntos haciendo turismo por el Pacífico Norte (Washington y Oregón) y por Nueva York. Lo llevábamos preparando un montón de tiempo y por fin llegó el día en el que les pude abrazar después de nueve meses sin vernos. 

    Asistieron ellos también a mi graduación también y es que, a pesar de ser un junior, me dejaron vivir esa experiencia americana de graduarse. Una vez más, me sentía parte de una película. 

    Al inicio, descubrimos dos estados bastante infravalorados en los que visitamos desde ciudades como Portland y Seattle hasta parques nacionales o cataratas enormes. Parecía que nos habíamos adentrado en Crepúsculo y es que la verde vegetación y la cantidad de agua que llovió no era para menos.

    Nueva York es Nueva York. Hay que ir sí o sí una vez en la vida porque no hay palabras para describirlo. La palabra que define la llegada es "caos": un montón de bocinas de coches, cero paciencia, gente muy peculiar, suciedad en las calles, etc. No obstante, esta es la magia de esta ciudad; encontrar a gente tan diversa.

    El primer día dimos un paseo en helicóptero que permitía ver todo el skyline de Nueva York y fue impresionante. Dimos un paseo por Times Square para conocer un poco más los lugares emblemáticos. Ese mismo día por la tarde, me dieron una tremenda sorpresa. Después de diez meses, ¡vi a mi prima en Nueva York! Habían venido desde España para darme la sorpresa y visitar junto a nosotros Nueva York. Con ellos vimos los lugares más conocidos: Empire State Building, World Trade Center, Central Park, la Estatua de la Libertad, y un larguísimo etcétera.

    ¡El mejor viaje de mi vida!



Comentarios